Historia de la Cofradía de Dolores de Ferrol

Tenemos constancia documental de que, en el siglo XII, en el pequeño pueblo de pescadores que era el Ferrol de entonces, existía la Cofradía Penitencial de la Virgen de los Dolores. En el siglo XIII, y bajo el patrocinio de la Virgen de los Dolores, se funda la Hermandad Gremial de Comerciantes de la villa de Ferrol, encargada de organizar y participar en las celebraciones de la Semana Santa y Corpus Christi. Esta asociación continuará vigente hasta que, a mediados del siglo XVIII, durante el reinado de Fernando VI, se auspicia que las cofradías de carácter gremial se transformen en cofradías de penitencia y caridad de acuerdo con las medidas de modernización del Estado, una de las cuales era la abolición de las sociedades gremiales. Así, el hasta aquel momento "autoflagelante" pasa a ser un "penitente" que acompaña a las Imágenes.

En este marco, la Hermandad de los Dolores se constituye como Congregación de Servitas (Venerable Congregación de Servitas de Ferrol) el 6 de diciembre de 1750 en el oratorio del Santísimo Cristo de los Navegantes, donde se hallaba expuesta para su veneración la imagen de la Virgen de los Dolores, en una pequeña capilla colocada al pie de la nave principal de la primitiva iglesia de San Julián, sita en el ahora conocido como barrio de "Ferrol Vello" (Ferrol Viejo) aproximadamente frente al antiguo cuartel de instrucción, a la altura de la calle del Espíritu Santo y cercana a la Plaza Vieja de la entonces villa.

Demolida la antigua parroquia en 1762 a consecuencia de los daños causados por la construcción del foso que circunda el arsenal militar, la imagen y la congregación se trasladan a la capilla de San Roque, que funcionó como parroquia hasta la inauguración del nuevo San Julián en 1772, donde se trasladó de nuevo la imagen y la congregación. Acabada la construcción de la nueva capilla por la Orden Tercera de Servitas en la Plaza de los Dolores (hoy Plaza del Marqués de Amboage) en 1780, se traslada definitivamente la imagen y se instala en el camarín de su retablo mayor (hoy tristemente desaparecido) en 1790. Desde entonces permanece en esta capilla que es sede canónica de la actual Cofradía. Desde el siglo XVIII, esta congregación tiene a su cargo los pasos de la Verónica y de San Juan Evangelista, que acompañaban a la Virgen en las procesiones del Santo Encuentro, celebrado entonces en la Plaza Vieja para trasladarse posteriormente a la de los Dolores (Amboage) y actualmente a la de Armas (antes del Carmen). La congregación organizaba también las procesiones del Desenclavo y Santo Entierro y la de la Soledad de Nuestra Señora (Caladiños) descrita por Montero Aróstegui como la más patética y solemne de la Semana Santa, siendo estas las únicas procesiones que se celebraban en el Ferrol del siglo XVIII.

Ya en 1943, la Cofradía de Dolores provoca un cambio definitivo en la Semana Santa Ferrolana. En la procesión de la Soledad (Caladiños) de ese mismo año ocho miembros de esta congregación (Venerable Real y muy Ilustre Cofradía) salen acompañando a la Virgen cubiertos con capuz y hábito penintenciales, siendo los primeros nazarenos -popularmente conocidos como "capuchones"- ferrolanos y marcando el inicio de la denominada como "moderna" Semana Santa Ferrolana.

Estos primeros capuchones impulsan en 1945 la fundación (28/XII/1945) de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia. La primera junta formada por: Demetrio Casares (presidente), Rafael Fernández Conde, José Soto Rojas, Miguel Vaello Canosa, Antonio Beltrán, José Mª Casares Fontenla, Federico Sánchez Plaza, José Ramón Caridad Fernández, Juan Francisco Vich Aragonés, Ramón Vich Aragonés, Pedro Castro Fernández, Juan Castro Fernández, Federico Pérez García y Antonio Benítez Pineda; impulsa la formación de nuevas cofradías que, con el tiempo, irán integrando en el seno de la Cofradía como tercios. Esta Cofradía fue, además, la encargada de organizar en los años 50 la procesión del Santo Entierro de Cristo, creando para ello la Cofradía de los Caballeros Portadores del Santo Entierro, con sede canónica en la misma capilla de los Dolores hasta 1961 que se traslada a la Concatedral de San Julián, constituyéndose como Cofradía independiente.

En 1992 se unen la Cofradía de Nuestra señora de los Dolores y la del Santísimo Cristo de La Misericordia, aprobando nuevos estatutos y pasando a denominarse, desde ese momento, Venerable Real y Muy Ilustre Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia y María Santísima de los Dolores, heredando los títulos, historia y prebendas de esta última. A partir de este momento, se van incorporando como tercios las diversa cofradías que tenían su sede en la parroquia de Dolores, así como otros de nueva creación.

ESCUDO

Es la unión de los escudos de las dos cofradías cotitulares que dan nombre a la cofradía actual:

Por la Cofradía del Cristo de la Misericordia: cruz latina inscrita en un óvalo rodeado de dos ramas de laurel que se cruzan en la parte inferior; en la parte superior, corona real. Todos los elementos en plata.

Por la Cofradía de la Virgen de los Dolores y yuxtapuesta a la anterior: Letra "M" redondeada con palo central alargado terminado en punta en el que se entrelaza una "S" también redondeada, inscrita en un óvalo rodeado de dos ramas de olivo que se cruzan en la parte inferior, en la parte superior, corona real. Todos los elementos en oro. Sobre estas coronas otra corona real en oro que se apoya en las mismas.

                                               

SEDE CANÓNICA

Capilla de los Dolores construida por la Orden Tercera de Servitas, consagrada en 1780 y cedida en los años 60 a la Diócesis de Mondoñedo-Ferrol. A partir de este momento la Diócesis la erige en parroquia, se encuentra situada en c/ Méndez Núñez s/n, Ferrol.

Fuente: Página web de la Hermandad (www.cofradiadedolores.org) y elaboración propia.